Las Manos Detrás de Lazaditas

Hola Soy Andrea, nací en Caracas Venezuela hace unos 30 y tantos años, no tan 30 y tantos jaja, felizmente casada y con dos Hijos Alessia de 5 y Alonso de 2.

Publicista de profesión pero creativa por pasión. Desde niña me encantaban las manualidades, aprendí a coser a mano desde muy pequeñita, mi abuela materna me enseñó, entonces empecé a coser botones, hacer con tela coletas tipo donuts de esas que se usaban en los años ochenta, pero que ahora puede que estén vigentes otra vez y algunas cositas para las muñecas o barbies.

También me gustaba mucho escribir, siempre jugaba con las maquinas de escribir de mi casa o la de mis abuelos a que era periodista. Me imaginaba que tenia una sección llamada: ¨Queridas Amigas¨ ahí plasmaba historias súper interesantes que con seis u ocho años eran muy divertidas, mi madre, tías y abuela, se deleitaban escuchando mis historias.

Al crecer mi gusto por las artes y letras fue aumentando, pero nunca me di cuenta que era totalmente humanista hasta que los golpes de la vida me lo hicieron entender, ya que se me ocurrió la brillante idea de estudiar Ingeniería. Vaya locura! para una adolescente que no era buena en ninguna materia científica

Fue así como empecé a estudiar Comunicación Social, carrera que me encantaba, pero por fuerzas mayores no pude seguir cursando. Entonces inicie la carrera de Publicidad. Me encantaba, para mí fue un paseo, me sentía como pez en el agua. Y así que con honores, y una tesis de 20 puntos, me convertí en Publicista.

Trabaje en Agencias de publicidad creando campañas para reconocidas marcas.

Pero llego el momento de convertirme en madre y decidí dejar de lado mi carrera profesional, por quedarme a cargo de mi pequeñita.

Decisión de la que no me arrepiento, ni cambiaría si lo tuviera que volver a hacer.

Entocés llego a mi vida la niña de mis ojos, mi muñeca. La que tenía mas ropa y zapatos que yo! Y para cada ropita, mami le hacia su lazo a combinación.

Tenia tantos lazos como pañales usaba al día, lazos que dejaban a todos atónitos en la calle y con la boca abierta. Ella mi inspiración y mi impulso a convertir un hobby o una habilidad en un forma de ganarme la vida, y en la oportunidad de ver crecer a mis hijos haciendo lo que me gusta, cerca de ellos, crear. Porque cuando se hace lo que te gusta no es un trabajo. Lazaditas